4.1 Retira la corteza y grasa amarilla
Hazlo únicamente en la zona que vayas a consumir. La grasa blanca se puede utilizar para cubrir la superficie y conservar el jamón.
4.2 Haz un corte limpio y horizontal
Crea una base recta que te permita mantener una superficie nivelada mientras avanzas con las lonchas.
4.3 Corta lonchas finas, alargadas y con algo de grasa
El grosor ideal es de unos pocos milímetros. La grasa aporta jugosidad y equilibrio de sabor.
4.4 Mantén la superficie nivelada
A medida que avances, asegúrate de cortar de forma uniforme para no crear desniveles que dificulten el corte.
4.5 Cambia de zona según el avance
Una vez hayas aprovechado bien la maza, pasa a la babilla, luego la cadera y finalmente el jarrete.
4.6 Tabla: Partes del jamón y tipo de corte ideal
A continuación, te explicamos las principales zonas de la pata de jamón, sus características y cómo deberías cortarlas para aprovechar todo su sabor y textura:
Es la parte más carnosa y jugosa del jamón. Se encuentra en la cara exterior, y suele ser la más apreciada por su textura tierna y gran cantidad de infiltración de grasa.
Tipo de corte recomendado: Lonchas largas y finas, comenzando por esta zona si el jamón se va a consumir rápidamente.
Esta zona está en la parte contraria a la maza, y es más curada y firme, con menos grasa. Se recomienda iniciar por aquí si el consumo será más lento, ya que se conserva mejor.
Tipo de corte recomendado: Lonchas más pequeñas para compensar su menor jugosidad.
Se sitúa en la parte del jamón más cercana a la pezuña. Tiene una alta concentración de sabor debido a su curación, y puede tener un toque más intenso.
Tipo de corte recomendado: Corte en virutas o lonchas más gruesas según preferencias.
Es la parte fibrosa ubicada junto al hueso. Aunque más difícil de cortar, tiene un sabor muy potente y se aprovecha mejor en trozos pequeños.
Tipo de corte recomendado: Ideal para cortar en tacos o utilizar en guisos.